martes, octubre 12, 2004

...

Últimamente, todo ha cambiado a mi alrededor. Y me refiero a lo que se me mueve por dentro: a mi cuerpo, mis entrañas, mi cerebro. Mi vida ha dado un vuelco, y soy la misma que con doce año creía dueña de algo, hasta que descubría los zapatos de su madre de tacón alto, y la vida ya sólo era tambalearse sin equilibrio del salón al comedor y del comedor a un dormitorio. Pero ahora por fin llego, no tengo que ponerme de puntillas para verlo. La curiosidad y la inquietud son la misma, sólo que ahora estoy dentro. Ya no soy esa niña que miraba a su familia sentada frente al televisor, escuchando las noticias y deseaba ser mayor como ellos para que aquello se convirtiera en palabras comprensibles, que soñaba con entenderlo todo. Pero aunque ya sea mayor, cuando me miro al espejo, tengo la sensación de estar haciendo una travesura, de haber engañado a la profesora, y que ahora vaya a venir alguien a decirme indignado que me castiga sin recreo.

A veces me siento extranjera en mi propia vida. Turista de tercera, visitante anónima, medio curiosa medio cansada. Sentada sobre las escalinatas frías de algún templo, observando pasar delante mí a grupos de gente ruidosa. Esperando mientras paseo, que el presente, cada minuto nuevo, se desembale solo del papel de regalo en el que viene envuelto. A veces demasiado grande como para que haya hueco en mi maleta, y a veces, demasiado pequeño para encontrarlo luego en mi viaje de regreso.

1 Comments:

At 5:15 p.m., Blogger soy un asteroide said...

Disculpa el que haya irrumpido en tus pensamientos, lo que escribes me ha puesto a reflexionar, y no es el que no sepamos nada, es que aun nos falta tiempo para aprenderlo.

p.d me encontre tu blog por alli, ciao, besikos!

 

Publicar un comentario

<< Home