Cuando te tengo
Cuando te tengo soy
después desaparezco
vago por un paisaje de voces peregrinas
mis átomos cansados
se pegan a la muerte de las monotonías
y no puedo encontrarme
aún cuando tus sílabas dibujan la memoria
las células dispersas
se vuelan con el viento
Cuando te tengo soy
después desaparezco
a rumiar mis temores
a morderme los sueños
a venderme ilusiones
a modelar silencios
cuando te tengo soy
jamás desaparezco
será que estás metido tan hondo en mi conciencia
que la sangre y la carne son meros combustibles
donde arde la pasión con caricias y besos
será que esta locura incurable de tenerte
es más fuerte que todo y que por sobre todo
señorea la magia de tenerte siempre.
Sí, lo dijo la que no sabe nada A las10:14:00 a.m.
7 reclamos
7 Comments:
Precioso poema... sólo atino a comentártelo, paso muy seguido por aquí pero casi no comento, me gusta tu blog.
Saludos.
que tengas un buen inicio de semana!! espero estes bien:D
Precioso como acostumbras, pasé a saludar...
Henry tenía razón. Las personas son como los piojos. Se meten debajo de la piel. Intentas sacártelas rascándote, incluso haciendote sangrar. Pero es difícil despiojarte.
Hermoso... Sonrie.
Me gustó mucho ese poema.
Tu ERES siempre y en todo momento.
Tu ERES por ti misma.
Tu ERES y estás aquí y ahora.
Tu ERES tú.
Se feliz.
// cuando estás, cuando eres, cuando saboreamos el elhixir de tu olvido, de la soledad de los sueños que nos huelen aún a tu piel, que se nos meten por entre el deseo amoratado... //
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